Por Maresia Díaz
Nuestro perfil de Facebook, funge como una extensión, virtual, claro, de nosotros mismos, de nuestra personalidad. Lo que somos se ve claramente reflejado ahí.
Alguna vez hablamos de cómo algunas universidades toman la decisión de aceptar o no a sus próximos estudiantes a partir de la actividad en Facebook de ellos; lo que comparten, lo que comentan, a lo que le dan like y de qué son fans, todo cuenta.
La Universidad de Illinois, la Universidad de Auburn y la Universidad de Evansville hacen investigaciones que demuestran que los perfiles en Facebook determinan la personalidad y el potencial de los posibles empleados. Se estudiaron 56 perfiles de Facebook y se tomaron en cuenta las características de los "Cinco Grandes" de la personalidad: la apertura, la escrupulosidad, la extraversión, agradabilidad y neuroticismo. Los mismos usuarios fueron contactados después para darles seguimiento de 6 meses y encontrar relaciones con su desempeño en el trabajo (es decir, el desempeño de tareas, la ciudadanía organizacional hacia los individuos, la ciudadanía organizacional hacia la empresa).
El resultado de la investigación fue que se encontraron las relaciones entre las características de la personalidad de los "Cinco Grandes" extraídas de Facebook y concebidas en la realidad con el proceso de trabajo.
Entonces Facebook propone una nueva manera de reclutamiento laboral, pero más allá de la mera elección de los empleados, Facebook sugiere la posibilidad de conocer, digamos, a las personas, de encontrar sus habilidades y sus procesos mentales que llegan a ser más profundos y conociendo estos, la relación con el exterior -en este caso, la manifestación en un ambiente laboral- cobra sentido y causa.
Insisto, y espero no cansarlos, que tomar como suplente a las redes sociales, a la foma virtual del contacto personal, de la experiencia humana y enriquecedora, es algo que causa nerviosismo. No podemos dejar uno por otro sino que van de la mano, son un apoyo, una herramienta más que, sin posibilidad de negarlo, es una genialidad.